La caída libre de Albert Luque

Albert Luque, aquel jugador que creció en la cantera del Barça y maravilló en el Mallorca y en el Deportivo de la Coruña, lleva 6 meses sin equipo, y ya parece que no podrá jugar al fútbol jamás al más alto nivel, ya que no parece que un equipo de divisiones altas del fútbol europeo vaya a querer contar con los servicios de un jugador que parecía que iba a ser una estrella cuando se le veía romper defensas desde su posición de interior izquierdo, pero que a sus 33 años parece estar en el final de su carrera. Una carrera que empezó a caer cuesta abajo demasiado pronto, y que paso a describiros a continuación.


Albert comenzó su carrera como futbolista en la cantera del Barça para posteriormente fichar en 1998 por el Mallorca, club que le cedió al Málaga una temporada después para disfrutar de minutos. En el equipo de la ciudad andaluza se empezaron a ver los primeros buenos detalles del jugador de Tarrasa, detalles que se convertirían en grandes actuaciones al año siguiente en el Mallorca donde marcó 9 goles y ayudó al equipo a entrar en la fase previa de la Champions League, donde él fue el héroe del equipo con un gol en la prórroga ante el Hadjuk Split. Ese mismo año volvió a deslumbrar en la isla mallorquina al marcar 15 goles, lo que le hizó fichar por el Deportivo de la Coruña por 15 millones de euros.

En el Deportivo llegó la explosión definitiva del catalán jugando tres temporadas con los gallegos y marcando 31 goles durante ese tiempo, algunos de ellos importantísimos como en el histórico 4-0 contra el Milán en cuartos de final de la Champions League de 2004, donde marcó el decisivo tercer gol que ya daba la clasificación al equipo coruñés.


Además durante este periodo en La Coruña, Luque comenzó a ser habitual en las convocatorias de la selección vistiendo 18 veces la camiseta de España y jugando el mundial de Corea y Japón del año 2002.



Con la llegada del mercado de fichajes de 2005 la carrera de Albert Luque comenzó a venirse abajo. Una oferta aceptada por el Deportivo de 14 millones llevaría al catalán al Newcastle United, donde Luque jugó dos temporadas a un nivel muy inferior al que nos tenía acostumbrados, además de que las lesiones y la mala imagen del equipo en general contribuyeron a que su paso por Inglaterra fuese de todo menos satisfactorio.

Tras esta aventura inglesa, el Ajax ficha a Luque en 2007, y en el equipo holandés no sólo no mejora su juego sino que se ve envuelto en toda una serie de problemas tanto deportivos como extradeportivos que le llevan a jugar poco y mal, con lo que el Ajax decide cederlo al año siguiente al Málaga, donde reconvertido a delantero centro marca 8 goles y parece que comienza a levantar de nuevo un poco su carrera, consiguiendo a final de temporada desvincularse del Ajax (no sin problemas) y fichar definitivamente por el Málaga donde de nuevo no vuelve a mostrar su mejor nivel y ya en la pasada temporada Pellegrini decide deshacerse del catalán (tras jugar sólo 85 minutos en media temporada) y el Málaga le da la carta de libertad en el mercado de invierno, no consiguiendo Luque fichar por ningún otro equipo.



Esta es la historia de un jugador cuya carrera, como la de muchos otros, da un vuelco total con la toma de una decisión errónea, o con un cambio de equipo poco beneficioso. Ahora todos nos preguntamos hasta donde habría llegado Luque si hubiese fichado por otro equipo que no fuese el Newcastle (hasta el Barça estuvo intereasdo en sus servicios en varias ocasiones) o si se hubiese quedado en La Coruña, pero jamás lo sabremos.



Desde aquí desear suerte a Luque en esta etapa final de su carrera, y darle las gracias por todo el gran fútbol que en su día salió de sus botas.